martes, 7 de abril de 2009

Empresas que Sanan

Aplicabilidad de la teoría de los 5 elementos en la empresa

Vivimos vinculados a una o más empresas. Incluso, aunque no nos lo parezca, nuestra vida personal también lo es. Sin embargo, la primera y más inmediata la forman los órganos de nuestro cuerpo. Cualquier aspecto de lo humano -desde lo corporal a lo social pasando por lo organizacional- va en busca de la estabilidad, bienestar, equilibrio, superación y progreso. Partiendo de este hecho, podríamos llegar a captar que la dinámica de la fisiología corporal es extrapolable a entornos de empresa. Incluso la familia, otra empresa, cuyo orden puede ser percibida a la luz de esta óptica. Precisamente, para captar las funciones y principios fundamentales que se van repitiendo en ámbitos tan diferentes, acudo a la percepción privilegiada en la que se sustenta la Medicina China. Su filosofía de los 5 elementos también puede ser aplicada en entornos sociales. Por otro lado, resulta curioso comprobar cómo en el mundo del management existe un consenso en cuanto a la percepción de la dinámica de las empresas en base a 5 funciones fundamentales, las cuales nos las vamos encontrando con nombres, apariencias y estilos que varían según la cultura de cada organización.

La filosofía de los 5 elementos supone entender que tanto el cuerpo humano como las organizaciones –y el paisaje en el que están insertos y se desenvuelven-, evolucionan siguiendo pautas marcadas por el ciclo anual de las estaciones. Cada estación –hay 5 según este sistema- pone en evidencia una función, un principio, una misión, una emoción, un conjunto de rasgos del carácter, un tipo de acontecimientos y un rasgo definitorio en el paisaje en el que están contenidos tanto lo biológico como lo social. Así, pues, nos encontramos con que la vida del cuerpo (lo fisiológico y lo emocional) y de las empresas (lo sociológico) danzan bajo la influencia de un ritmo común. El mismo calendario que organiza la vida exterior también lo hace con la interior. Cada estación ayuda a poner de relieve una sintomatología que ayuda a captar el estado de funcionamiento de un sistema de órganos (en el cuerpo) y de departamentos (en la empresa). El clima y el momento energético otorga una característica al paisaje que influye en el contenido y tono emocional con que se viven los acontecimientos. Un mismo hecho acaecido en primavera o en otoño va a ser experimentado de forma distinta; y sus consecuencias, por supuesto, también tendrán un deriva igualmente distinta. A un mismo síntoma que tuviera lugar en estaciones diferentes, se le daría un diagnóstico y un tratamiento diferentes. Eso mismo sucedería en la empresa, en donde el biorritmo corporal (colectivo) también tiene su correlato.

Funciones - Organos - Departamentos

A continuación propongo algunas pistas con las que poder asociar cada elemento a una función. Cada una de ellas, portadora de un principio fundamental, es administrada en el cuerpo humano por un sistema de órganos y, en la empresa, por unas actividades y departamentos que las ejecutan.

Elemento Madera
Primavera (desde mediado marzo hasta final de mayo)
Sistema Hepático y Vesícula. Departamento de formación.
Ideas. Innovación. Creatividad. Emprendizaje.

Elemento Fuego
Verano (desde final de mayo hasta mediado agosto)
Sistema Cardiaco e Intestino delgado. Junta directiva y secretaría de dirección
Liderazgo. Irradiación. Decisiones, Acuerdos.

Elemento Tierra
Canícula y Verano Tardío (desde mediado agosto hasta final de octubre)
Bazo-Páncreas y Sistema Digestivo. Sistema financiero, contable y administrativo.
Logística. Transporte. Productividad. Proveedores.

Elemento Metal
Otoño (desde final de octubre hasta final de diciembre)
Sistema Pulmonar e Intestino grueso.
Argumentos. Marketing. Publicidad y medios de comunicación. Clientes.

Elemento Agua
Invierno (desde final de diciembre hasta mediado marzo)
Sistema Renal.
Selección de personal. Auditorías. Eliminación. Transmisiones y herencias.

Para una mayor información, visitad Cartografías Orgánicas